Hoy es de esos días que me gustaría escribir una de esas largas entradas reflexivas, de pararme un momento en este horrendo día caluroso a pensar sobre las pocas horas que faltan para que se hayan cumplido quince rotaciones terrestres alrededor del sol desde el momento en que nací.
Aunque amo los motivos para quejarme (?) No puedo decir que ha sido una existencia vacía, nah. He tenido muchos bajoaltis a lo largo de estos 15 años, me di cuenta de que jamás he tenido un verdadero amigo, detesto mi ambiente y amaría marcharme a la mierda, pero sinceramente podría haberme ido mucho peor.
He reído, gritado, llorado, saltado. De cierto modo, aunque en muy pocos minutos, he vivido, aunque el resto de mi existencia se limite a una subsistencia con la esperanza puesta en el futuro. Quizás soy dramática...bueno, no quizás, soy dramática, pero, a veces me pregunto si necesito ayuda psicológica, es decir, no es normal tener ganas de matarlos a todos todo el tiempo.
Me perdí otra vez.
¿Quién dijo que yo soy normal?
Sea como sea, sé que mañana será un día común y corriente, con mi hermana gritándome y todo lo demás, y por alguna estúpida razón, eso me hace sentir mal.
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